lunes, 19 de diciembre de 2011

Los tres chanchitos

Yo tenía una casita
con tres ventanas
y una puerta.
Las alfombras eran de pasto
los relojes tenían canarios aulladores.
De la tele salía lluvia
cosíamos nubes en las sábanas
la radio nos traía rayos de sol
y caravanas.
En el centro una mesa
dos sillas grandotas
dos sillas chiquitas.
Arriba una virgen de yeso
con discordia de pedestal
piecitos desnudos
llenos de rosas.
A la derecha un sillón
que daba almendras en verano.
A la izquierda un teléfono
que daba naranjas en invierno.

La reja era una gran cruz de madera.

Llegó un chanchito
intentó soplar mi casa
pero sólo se cayó la cruz.
Pusimos una reja de plumavit.

Llegó otro chanchito
hizo temblar la casa
nos ahogamos entre los cristales
de una lámpara
nos tragamos los tenedores
de la cocina
y con una pala de madera
salimos de entre los chinches y las arañas.

Llegó un tercer chanchito
pasó callado y midió con billetes
mi hogar dulce hogar.
Miró nuestro techo azucarado
y puso sal en mi única puerta.
Vino al otro día y habló con mi mamá,
Ay sí! Ay no! Al niño lo quiero yo.
que tu casita tan bonita
que esa tierra donde la tienes es mía
que por qué, que aquí no, que allá mejor
Ay sí! Ay no! Al niño lo quiero yo.
Mi papá temblaba.

Apareció otra vez el chanchito
venía con corona, cetro y capa de plumas.
Entró a mi casa:
rompió la puerta,
quebró las ventanas,
desplumó los relojes,
botó la virgen
le quitó sus rosas
y quemó las sillas.

Ay sí! Ay no! Ay no! Ay no!
¿Dónde está el niño que quiero yo?.